martes, 31 de enero de 2012

Desde pequeña me han dicho que si alguien quiere conseguir algo y se esfuerza para ello, acabaría consiguiéndolo... No es así.

Estoy harta de hacer mis manos sangrar por tirar de la cuerda hacia mi lado, para luego caerme al suelo debido a la poca fuerza que utiliza el otro extremo. Muchas veces me pregunto si el "esfuerzo" es otro cuento chico que los padres nos cuentan para que seamos buenos y no tengamos miedos en la vida; como el de que no hay monstruos debajo de la cama o en el armario. Me siento encerrada en mi propia cárcel sin barrotes, la única llave para poder salir es conseguir aquello que anhelo y es imposible.

El esfuerzo no siempre es suficiente. Es algo que he tenido que aprender con el tiempo; y he sido bastante rápida, pero no lo suficiente para evitar el último golpe.

No sé si habrá monstruos debajo de mi cama o entre la ropa de mi armario, sólo sé que sí los hay en la mente de cada uno.

Cucurucho de Vainilla....